26 noviembre, 2007

Concesionario

Al lado de mi casa hay un restaurante, con bastante nivel, una papelería que está ahí desde que tengo uso de razón, y un taller y concesionario Wosvagen(o como se escriba). En ese concesionario, que también está ahí desde que tengo uso de razón, trabaja un hombrecillo. Desde siempre, está ahí desde que tengo uso de razón. Y me cae bien. Demasiados años viendolo trabajar en ese sitio. Demasiados años viendolo trajeado paseandose con clientes visitando los coches. Demasiado años pasando por ahí y viendolo en la mesa trabajando. Pero hasta hoy no me había dado cuenta de una cosa-el hombrecillo se ha ido haciendo bonachón-; que es padre de família. Tanto pasar por ahí, tanto verlo, tan acostumbrada estaba de verlo ahí. Que hoy al pasar y verlo fuera, saludando a sus hijos y a su mujer, con una sonrisa en la boca. Me ha echo esbozarmela a mí. ¡Joder! Que tiene vida propia, problemas, mujer, hijos, casa....y no habia caído. Que aunque lo viera ahí, cada uno tiene su vida, sus problemas y su trabajo. Pero tan acostumbrada estaba al verlo...que me ha sorprendido verlo jugar con su hijo. Que tiene sueños, tristezas, esperanzas, anhelos.....
Que cosas me pasan aun estando parada, tan parada que me canso sólo de pensarlo.

No hay comentarios: